La importancia de la inmunización y los cuidados para hacer frente al Coqueluche

 

·         Hace menos de un mes, tres lactantes murieron a causa del coqueluche y se reportaron varios contagios por la misma razón. La enfermedad que afecta principalmente a menores de un año en Chile está incluida  en el Programa Nacional de Inmunizaciones (PNI) de carácter gratuito. Especialista se refiere a qué medidas tomar en estos casos y cómo evitar su contagio.

 

 

El Coqueluche, también llamado Tos Convulsiva o Tos Ferina, es una enfermedad infecciosa que compromete las vías respiratorias altas y bajas, es decir desde la faringe hasta los bronquios.  Es producida por una bacteria llamada bordetella pertussi,  que se trasmite por gotitas de secreciones de personas infectadas a personas sanas especialmente los lactantes, al hablar y/o  toser y que se depositan en las manos y objetos.

“Es muy contagiosa durante los primeros días de la enfermedad y se puede mantener hasta la segunda semana. Luego la transmisibilidad disminuye hasta llegar a ser insignificante en unas 3 semanas. Un niño enfermo y  con tratamiento adecuado  deja de ser contagioso después de 5 días de tratamiento”, indica Patricia Fernández, Directora de la Escuela de Ciencias de la Salud de la Universidad del Pacífico.

La profesional de la salud, agrega que al inicio de la enfermedad el lactante presenta coriza y tos leve que dura una a dos semanas. “Luego continua con tos irritativa prolongada, espasmos de tos que terminan con ´estridor´ o ´gallito´ y que puede llegar a producir apneas y la muerte del niño”, plantea.

En el caso de los adolescentes o adultos los síntomas pueden ser atípicos o más leves, añade. “En estos casos la tos puede prolongarse a más de 2 semanas y sin síntomas sistémicos. Esto ocurre por la pérdida habitual de la inmunidad adquirida por las vacunas lo que ocurre entre 5 y 10 años después de la última dosis”, explica la académica.

Sea cual sea el caso, la enfermedad tiene algunos síntomas generales. “Se acompaña de vómitos, cianosis, inapetencia, la fiebre no es característica en este problema de salud”, detalla.

En relación a los recientes casos presentados en el mes de Octubre en la región del Maule, la experta indica que son parte de la problemática que se viene observando desde hace un tiempo en el país. “Efectivamente en Chile en los últimos años se ha observado un aumento de casos de tos convulsiva o coqueluche en lactantes menores de 6 meses, para ello, el Ministerio de Salud (MINSAL) ha implementado una serie de estrategias para la población susceptible, además de fortalecer la educación para el cumplimiento del programa Nacional  de Inmunizaciones(PNI). Además el MINSAL ha planteado complementar las medidas actuales con nuevas estrategias  como la estrategia “capullo” en el año 2012 con el propósito de proteger al recién nacido y a los lactantes menores implementando la vacunación del entorno familiar de los recién nacidos como a las madres antes del alta de la maternidad, los contactos domiciliarios mayores de 12 años y el  personal de salud a cargo de niños y cuidadoras que convivan todo el día con el recién nacido. Junto con ello, se inició en forma gradual la vacunación de adolescentes que cursan octavo año básico”, comenta.

Por otra parte, apunta Fernández, el MINSAL como medida de protección a partir de este año ampliará la protección de la enfermedad al feto desde el embarazo. “La vacunación se efectuará a las embarazadas con edad gestacional mayor a 28 semanas de gestación, debido a que en esta etapa se traspasan los anticuerpos de la madre al feto a través de la placenta y así lograr proteger al bebé durante los primeros meses de vida. Esta vacuna es segura, no afecta al feto porque es inactivada”, indica la profesional.

En caso de presentarse esta enfermedad, la especialista señala que el tratamiento es farmacológico y consiste en la administración de antibióticos. “Siendo lo ideal su administración en una fase  temprana, ya que en la mayoría de los pacientes el diagnóstico se establece en el estadio avanzado de la enfermedad, cuando los antibióticos pueden ser poco efectivos, pero de todos modos es posible que eliminen la bacteria de las secreciones y así reduzcan rápidamente el riesgo de que el paciente transmita la enfermedad a otras personas”, explica.

Prevención y Cuidados generales

La enfermedad que afecta principalmente a menores de un año en Chile está incluida  en el Programa Nacional de Inmunizaciones (PNI) de carácter gratuito y se incorpora en la conocida DTP (de las siglas Difteria, Tétanos y Pertussis),  a los 2, 4, 6  y 18 meses, más 2 refuerzos  en primero y octavo básico respectivamente.

En este sentido la enfermera hace un llamado a que el niño, además de que asista a sus controles de salud, sea vacunado de acuerdo con este plan nacional de inmunización.  “El niño debe recibir las tres primeras dosis para lograr efectividad de la vacuna”, enfatiza.

Patricia Fernández agrega que es importante recordar que esta enfermedad no está controlada en el país y que no es exclusiva de lactante menor, por lo que hay que tener presente otras importantes medidas preventivas como:

·         Reforzar la vigilancia de casos y de brotes

·         Realizar manejo de contactos con antibióticos por 7 días  según corresponda:

–          Menores de 1 año

–          Menores de 2 años con menos de 2 dosis de vacuna DTP

–          Adultos > 65 años

–          Embarazadas en tercer trimestre

–          Pacientes portadores de patología cardiorrespiratoria crónica

·          Vacunación a las embarazadas con edad gestacional mayor a 28 semanas de gestación

·         Evitar el contacto con lactantes y niños de corta edad, especialmente susceptibles no inmunizados hasta que los pacientes reciban tratamiento antibiótico durante 5 días en un esquema mínimo de 7 días. 

Para los casos en que se presente el Coqueluche, la experta plantea que los principales cuidados deben ser:

·         El niño puede de acuerdo a su condición requerir hospitalización especialmente los menores de 6 meses

·         Si está hospitalizado requiere aislamiento respiratorio.

·         Mantener reposo relativo

·         Alimentación a tolerancia, fortaleciendo la lactancia materna

·         Aseo nasal frecuente

·         Abundantes   líquidos

·         Mantener al niño en un ambiente limpio y aireado, y en una posición que disminuya los accesos de tos.

·         Administrar antipiréticos en los casos de fiebre (temperatura mayor o igual a 38,5ºC)

·         Educar a los padres sobre complicaciones como fiebre por más de 3 días, dificultad respiratoria, decaimiento marcado, apnea, entre otros.

·         El niño puede reintegrarse al jardín infantil o colegio después de 5 días de tratamiento antibiótico como mínimo y si su estado lo permite.

·         Notificar la enfermedad al Ministerio de Salud, esto lo realiza el centro de salud donde se controle el niño ya que es una enfermedad de notificación obligatoria  para la detección y el control de posibles brotes epidémicos.

·         Todas las personas que están en contacto con el niño deben protegerse, lavarse las manos antes y después de estar en contacto directo con el niño, usar mascarilla y cumplir con el tratamiento de contactos.